Carta abierta del presidente de la Fundación Fontilles
Juan Lorca Salañer · Presidente de la Fundación Fontilles
La pandemia del coronavirus está haciendo que vivamos momentos excepcionales y situaciones inimaginables hasta hace unos meses. Fontilles, con más de 100 años de historia, ha vivido otros periodos de crisis e incertidumbre y siempre ha dado lo mejor de sí. Nuestra experiencia nos dice que, juntos, podemos superarlos.
Desde Fontilles, estamos trabajando al 200% para garantizar que nuestro trabajo continúe con la máxima seguridad, tanto para nuestros beneficiarios, como para nuestros trabajadores.
Nuestra prioridad han sido, desde el primer momento, los residentes del Hospital Ferrís y el Centro Geriátrico Borja, en el Sanatorio de Fontilles, en Vall de Laguar (Alicante).
Afortunadamente, y a pesar de que nos vemos también afectados por la escasez de material de protección, el personal, los residentes y familiares, con su colaboración y compromiso, están haciendo todo lo posible para mantener un entorno seguro para todos.
Por otro lado, no debemos olvidar los estragos que puede causar la pandemia a su paso por países como India, donde ya hay personas afectadas aunque, de momento, no en las zonas donde desarrollamos nuestros proyectos de lucha contra la lepra y otras enfermedades desatendidas. No obstante, debemos estar preparados y reforzar nuestra ayuda a las entidades socio-sanitarias con las que trabajamos. En países como Nicaragua, hemos empezado ya a impartir talleres de formación en medidas de prevención para los promotores de salud de nuestros proyectos. Actividades para las que necesitaremos más que nunca tu solidaridad.
Por todo ello, desde Fontilles, quiero transmitirte nuestra gratitud por tu apoyo de estos años, que cobra mayor valor en momentos como el que estamos viviendo.
Nuestro reconocimiento y gratitud, también, a todas las personas que están contribuyendo, directamente o de forma indirecta, a acabar con la pandemia y a asegurar los suministros y servicios que necesitamos para seguir adelante en esta situación excepcional.
Por último, nuestra solidaridad con los que están sufriendo, los que están luchando por superar la enfermedad y los que han perdido a alguien querido.
Con la esperanza de que pronto volvamos a la normalidad, mis mejores deseos para ti, tu familia y tus allegados.